Ante la dificultad de conocer con certeza si la función de cumplimento instaurada e implementada en una organización, tiene el suficiente vigor para ser considerada real y efectiva, ya sea en el plano personal o societario, ya desde la perspectiva exógena de quienes deben medir o evaluar su fuerza e intensidad, hemos elaborado este termómetro que permitirá a cualquiera, por supuesto desde la inexistencia de efectos jurídicos, conocer su estado de situación, su salud o enfermedad y, lo que es más importante, la forma de mejorar a futuro.
El instrumento de evaluación es una clara manifestación de la colaboración público privada y de la autoregulación de la que participan y fomentan las instituciones que han elaborado este compendio, el Instituto de Oficiales de Cumplimento (Grupo de Trabajo del Sector Público) y la CNMC. A tal fin , toma como referentes los mejores estándares sobre la materia.
Inicialmente, y de forma conceptual, parte de la Guía Práctica de Autodiagnóstico y Reporting en Cumplimento Normativo, Buen Gobierno Corporativo y Prevención de la Corrupción elaborada por Transparencia Internacional España enlace cuya versión digitalizada fue realizada por la CNMC y la referida Organización internacional sin ánimo de lucro, y se encuentra disponible para todos los operadores como instrumento de autodiagnóstico en materia de cumplimiento normativo en el siguiente enlace: Guía Digitalizada.
Sin embargo, el grueso de los indicadores referenciados, traen causa del documento “MARCO para la PRÁCTICA PROFESIONAL del CUMPLIMIENTO. Naturaleza y alcance de la Función de Cumplimiento” y el trabajo del mencionado grupo público-privado.
En su confección han participado, esencialmente, un conjunto de empleados de sociedades mercantiles estatales, entidades públicas empresariales y otras formas de sector público instrumental y no instrumental.
Por supuesto la participación ha sido totalmente altruista , previa suscripción de un documento de inexistencia de conflicto de intereses y un decálogo ético creado para la ocasión.
Finalmente, el instrumento de evaluación, como no puede ser de otra forma, es gratuito y público, a disposición de cualquiera en las páginas web de las instituciones participantes en el proyecto.